martes, 18 de abril de 2017

Aves de paso.

He abierto el pecho de par en par
 y han salido todos los fantasmas de promesa,
 el polvo de mi cabeza
 y las ganitas de llorar.

Ha volado todo con la brisa de la palabras que acabé por escribirte.
 Que he acabado por leerte,
 porque era obvio que me perdería hasta en el sinsentido de las letras
 con tal de encontrarte en la ingenuidad de mis palabras.

He abierto el pecho de par en par
 y lo que en principio ha depurado este cuerpo,
 ha acabado por vaciarlo.

Chantajes literarios, en sentido emocional.
En el libro abierto por las páginas en blanco ya no sé quién resultó ser ave de paso.
Sólo sé que a cambio de mis espinas me has devuelto una herida de la que no querías ser disparo,
y me lo has dado de lleno en el centro de gravedad,
escondido de nuevo en la ajenidad en la que me empeño en encerrarme.
Y mentimos. Porque nunca fue tu intención.

Me siento ridícula
Como cuando desnuda me cuento las cicatrices cuando no hay quien quiera seguir contándome los lunares.

Me siento ridícula  porque era obvio que el amor siempre gana
Y tú y yo estábamos destinados a perder desde que tu historia y la mía seguían la misma dirección por caminos separados.
El agua vuelve al agua,
y este río de circunstancias no sabe  por donde correr.
Le cedo mis ojos.

Me siento ridícula y quiero irme.
 Pero me frena el inconfundible sabor a despedida.

Recuerdo las palabras cercanas de quién me dijo una vez que aprender a despedirse es crecer.
Y me siento tan pequeñita que me he visto en la necesidad de acariciarte el pelo hasta que no hemos podido más.

"Tenías que ir tirando".

Te has marchado.

Me he lanzado al sofá verde de cabeza; ese que no volverá a ser nunca tan acogedor como tus ojos aquella tarde de enero.

"El amor siempre gana" me he dicho. Y he sonreído, tranquila,
al volver a sentirme ajena.

He respirado empatía con sabor a rosas.
 Estoy conforme.

Encima de mi mesa, frente al sofá he encontrado una nota mía.
Se ha escapado de tu rojo favorito.
Rezaba: "Hay veces en las que me tiembla la vida y no sé dónde agarrarme".
El amor siempre gana.
Y me he echado a temblar.
-CelesteRegner